Inicio Noticias Categoría Crónica

SERNAM FORMA MONITORAS(ES) COMUNITARIAS EN PREVENCIÓN DE VIOLENCIAS CONTRA LAS MUJERES

admin el 08-09-2015, visto 1058 veces 0
Article Image

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En las comunas de Angol y Temuco comenzó a realizarse el curso de formación de monitoras y monitores dirigidos a dirigentas/es y líderes comunitarias/os de organizaciones territoriales y funcionales (vecinales, sindicales, educativas, de personas mayores, indígenas, migrantes, estudiantiles, culturales, trabajadoras sexuales, entre otras) de toda la Región. El cual tiene por  objetivo que las personas participantes adquieran y/o refuercen competencias que les permitan desplegar acciones de coordinación para la protección y sensibilización para la prevención de las violencias contra las mujeres.

La directora regional de SERNAM, Bárbara Eytel Pastor, explicó que ésta es una  medida presidencial que permitirá podrá ser aporte en la prevención de la violencia contra la mujer, porque “las mujeres tenemos derecho a vivir… y con la formación de monitoreas/es avanzaremos integrando herramientas que permita potenciar en sus comunidades la prevención de las violencias contra las mujeres”. Además de participar e involucrarse en un proceso grupal y comunitario  sobre la prevención de las violencias contra las mujeres que les permita detectar, acoger, derivar casos y realizar acciones de sensibilización.

La violencia contra las mujeres como una violación a los derechos humanos encuentra su fundamento en múltiples disposiciones internacionales, la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer, Belem Do Pará (1994) señala que la violencia contra la mujer constituye una violación a los derechos humanos y a las libertades fundamentales. En ese mismo sentido el Comité que vigila el cumplimiento de la CEDAW ha indicado que la definición de discriminación contenida en el artículo N° 1 de la Convención, incluye la violencia basada en el sexo, es decir, la violencia dirigida contra la mujer por el sólo hechos de ser mujer.

Respecto de este tema se entiende en un sentido amplio, dando cuenta de su diversidad de espacios, contextos, manifestaciones y mujeres afectadas: “La violencia contra la mujer, no se limita a una cultura, región o país en particular, ni a grupos específicos de mujeres dentro de una sociedad. Las diferentes manifestaciones de esa violencia y experiencias personales de las mujeres dependen de factores como el origen, la clase social, la edad, la orientación sexual, la discapacidad, la nacionalidad y la religión” (Naciones Unidas 2006).

La participación social es el vehículo que posibilita a las comunidades y a l@s actoras/es de un determinado territorio potenciar su protagonismo en las estrategias para el cambio sociocultural que se requiere con el fin de mejorar la situación de las mujeres. ONU Mujeres (2009) señala que intervenciones dirigidas a lograr cambios en el nivel interpersonal, relacional, comunitario y de la sociedad o aquellas que facilitan una más extensa movilización de la comunidad contra la violencia pueden tener un poderoso efecto en el cambio de la conducta individual.